La política de cooperación internacional de China en materia de Infraestructura asociada a la Revolución 4.0: África y América Latina como escenarios en la disputa por el liderazgo global.

El creciente rol económico y político de China en este siglo se plasmó, entre otras cosas, en su fuerte presencia en el denominado Sur Global, con un rol preponderante en el área tecnológica. La regiones de África Subsahariana y de América Latina, han sido escenarios del accionar internacional del China, el cual fue in crescendo hasta nuestros días, otorgándole a ambas regiones un nuevo protagonismo.Asimismo la Revolución 4.0, desde la segunda década del siglo XXI, orientó en múltiples dimensiones las políticas asociadas a la industria, la ciencia y la tecnología de las grandes potencias. China, caracterizada por la planificación a largo plazo, viene trabajando en ciencia y tecnología desde el siglo pasado. No obstante en el siglo XXI, se observó una proliferación de planes y políticas de fomento de la ciencia y la tecnología como herramienta para el desarrollo de este país. Se puede afirmar que nos encontramos frente a una carrera “tecnológica” en la que compiten grandes potencias, para alcanzar el liderazgo global.

China’s international cooperation policy on Infrastructure associated with Revolution 4.0: Africa and Latin America as scenarios in the dispute for global leadership.

The growing economic and political role of China in this century was reflected, among other things, in its strong presence in the Global South, with a preponderant role in the technological area. The regions of Sub-Saharan Africa and Latin America have been the scenarios of China’s international action which has been increasing giving both regions a new role. Likewise, Revolution 4.0, since the second decade of the 21st century, has guided the policies associated with industry, science and technology of the great powers in multiple dimensions. China, characterized by long-term planning, has been working on science and technology since the last century. However, in the 21st century, a proliferation of plans and policies to promote science and technology as a tool for the development of this country was observed. It can be said that we are facing a “technological” race in which great powers compete to achieve global leadership.